Entradas

Mostrando entradas de marzo, 2016

Si te veo de costado

 Si te veo de costado cuelgo de tu mejilla y tu rostro horizontal culmina un cuadro oculto. No es algo que yo haga intencionalmente pero afortunadamente sucede seguido debido a nuestra variante dinámica visual, solemos observarnos como dos fotógrafos. Pero cuando te veo de costado abandono todas mis profesiones y me vuelvo un espectador que contempla entregado.  Besar tu perfil es liberar los mares.  ¿Por que esta obsesión con mirar tu costado? No conozco la razón con precisión, pero intuyo que se relaciona con la posibilidad de observar la trayectoria de tu mirada, recorrer con mis pupilas la parábola de tus cejas y finalmente colgar de tu mejilla, aunque a veces muevo el orden del recorrido: balancearme y tomar impulso desde tu mejilla, treparme hasta tus cejas y dispararme en tu iris, imaginando estar en tus ojos, ver lo que ves, ser tu lente que admira luces, matices, planos y contraplanos.  Besar tu perfil es abandonarme por unos segundos.

Minimo

Poema chiquito: Me pellizcaste de manera intermitente y mi risa en puntas de pie jugaba al equilibrio como un poema chiquito escrito en la palma de tu mano. La cercanía no es mas que nuestro intento de ser lo mas pequeños posible, es librarle la guerra en silencio al espacio que nos aleja. Mis besos encapsulan el vacío que transporto y te absorben en mínimas cantidades, me vuelven ínfimo me envuelven mínimo en tu mano tibia por fin soy el verso que duerme en tu mano. Naciendo muero Soy un desierto por que naciendo muero soy lo que tengo dentro del cuerpo Resistí la humedad y nací en tus venas lavé tus penas teñidas de gris. Ayer descubrí que  la intensidad que me hace falta cuelga del filo de tu voz. Hoy me apagué y desde aquel silencio tomé impulso renaciendo. Busquedad Busco los pliegues vivos la ranura recóndita por que nada es evidente nada es estático. La difícil tarea de confeccionar vidrios que reflejen luces negras. Medir el v

Aproximaciones eternas

  Las aproximaciones eternas nos acorralan, Spinetta las llamaba un "teatro ilusorio", me acuerdo de él mientras por la ventana veo morir al cactus. No cuento con más que mi biología absorbente y la suma de mis extremidades para trepar por la carpa del circo, y así observar la fauna moderna: programadores que dibujan arboles que solo tienen raíces cubicas, diagramadores de piedras que se vuelven adictas al tropiezo del hombre y arquitectos que desvían los rieles fragmentados de la verdad.  Todos voltean ante una llamada desde atrás inexistente, pero caminando de espaldas al frente. Todos obviando que la quietud del silencio apacigua nuestras almas. Las luces han gobernado la historia que nos pasa al costado, han manipulado el desvarío del cuerpo inocente, las luces (no las que no alumbran sino las que enfocan) han llenado de morbo los medios de comunicación.   Ojos detrás de las pantallas, mentes detrás de las pantallas, estas manos escribiendo detrás de la pantalla, soy l